14 de junio de 2008

¡BIEN POR IRLANDA!

Hace poco el amigo blogservador nos alertaba sobre la fantástica medida que han tenido a bien aprobar los políticos europeos, acerca de la posibilidad de aumentar a 60 o 65 las horas laborales. Por eso y otras muchas cosas más, esta mañana he saltado de alegría cuando he leído en el periódico que entra en crisis el "tratadillo" de Lisboa gracias al NO de nuestros amigos irlandeses. Alguien téndrá que ir cortando esa orgía de poder económico y estatal, ese guetto político en que se ha convertido la Unión Europea.
Me pregunto: ¿Alguien ajeno a las elites políticas o periodísticas conoce realmente lo que dice el tratado de Lisboa? ¿Ha existido en algún lugar alguna campaña de información sobre el mismo? (Sí que las hubo - muy pintorescas algunas de ellas - para que votáramos todos SI al tratado constitucional.) Nos siguen queriendo colar por la ventana lo que de un modo sublime Francia y Holanda no dejaron que entrara por la puerta. ¿Se atreverán ahora a ratificar plebiscitariamente y país por país la aceptación de tan ignoto tratado? Me temo que no.
Y ahí radica uno de los problemas. La Unión Europea no es más que una platónica "mimesis" de la "mimesis". Si en nuestras políticas, aparentemente más cercanas (autonómicas o nacionales), estamos ayunos de cualquier atisbo de participación ciudadana y por lo tanto ya existe un alejamiento obvio de lo que es la democracia, las políticas europeas se alejan todavía más y aún queda más oculto cualquier parecido con lo que llamamos sistema democrático. Y es que parace que -como dice Santiago Petschen en un magnífico artículo en el Pais de hoy- "los líderes han renunciado a construir una Comunidad de ciudadanos, optando por una asociación de Estados", que por otra parte era el auténtico sueño de los padres del proyecto europeo.
¡BIEN POR IRLANDA!

11 de junio de 2008

XAVIER ZUBIRI O LA SOLEDAD DEL ORGANISTA.


"Conversaciones sobre Xavier Zubiri" es un interesante libro sobre lo que grandes personalidades del pensamiento del arte o de la ciencia, pueden contarnos sobre la figura del pensador vasco. Este libro de entrevistas aporta algunos aspectos nuevos a la, ya legendaria biografía sobre Zubiri, escrita por estos dos mismos autores: Jordi Corominas y Joan Albert Vicens.

Me quedo con fragmento de la entrevista realizada al músico Cristóbal Halffter, justificando el por qué le dedicó al filósofo una composición para órgana titulada Ricercare: "Me imagino a un organista en una iglesia española. Los órganos siempre tienen un acceso difícil, por unas escaleras pequeñas, complicadas. Arriba, sin ser visto, está tocando muy humildemente un organista, y abajo, sin él saberlo, muchas personas escuchan su mensaje. Es como la filosofía de Zubiri. Muy modesto, como si no quisiera nada, pero en realidad muchas personas se benefician de su pensar. Es como la labor callada del organista. No es como un concierto de piano, en donde sale un pianista y la gente le aplaude. El organista hace su música casi anónimamente y llena el templo de sonidos, transforma la realidad del templo a través de su música."

No creo que se pueda describir de un modo más ilustrativo la vida y el pensamiento de Xavier Zubiri, y en estos momentos en el que el medio es el mensaje, reividinco y deseo para la filosofía el sigiloso esfuerzo del concepto.

¿EL TIEMPO...?

SI NADIE ME LO PREGUNTA, LO SÉ; PERO SI QUIERO EXPLICÁRSELO AL QUE ME LO PREGUNTA, NO LO SÉ. Confesiones XI,14,17