14 de mayo de 2011

HOMENAJE A JOSÉ MARÍA MARDONES



Hace poco acabé de leer el último libro que escribió José María Mardones antes de fallecer de modo repentino. El libro se llama "Matar a nuestros dioses", altamente recomendable para todos aquellos que sintiéndose creyentes pueden albergar dentro de sí ciertas imágenes de Dios que le oprimen o esclavizan y que están muy alejadas del Dios que Jesús de Nazaret nos comunicó. Aquí una pequeña biografía y su incorporación a la Galería de personajes célebres:





José María Mardones nació el 14 de noviembre de 1943 en Zalla (Vizcaya). Pronto sintió la vocación religiosa y se hizo hermano marista. Fue a estudiar a Alemania, donde trabajó con los más grandes: J. Moltmann y W. Kasper. Aunque quien más le influyó fue el filósofo José Manzana, muerto prematuramente. Se interesó mucho por la Escuela de Fráncfort, sobre la que escribió dos libros especializados que siguen siendo referencia obligada para los estudiosos del tema.

Dedicó su vida a la Filosofía y a la Sociología de la Religión, tanto en la Universidad del País Vasco, donde impartía clases, como en el Consejo Superior de Investigaciones Científicas, donde trabajó con total intensidad. Como dice su amigo, el teólogo Xavier Pikaza, «su vida estuvo centrada en tres frentes: la investigación y la docencia, las publicaciones y el trabajo pastoral directo en diversos grupos y comunidades».
Porque Mardones fue siempre un teórico con raíces práxicas. De hecho, cuando volvió de Alemania, fundó junto a otros maristas vascos, como Patxi Loidi y Pedro Olalde, la sociedad de vida apostólica Fe y Justicia. Era, por lo tanto, un religioso de votos privados de derecho diocesano, que dependía del obispado de Bilbao.

Como pensador es una referencia constante en las últimas décadas de la Iglesia española. Un filósofo serio, profundo, pero libre. Analizaba el fenómeno religioso con total valentía. Y era uno de los pocos que se atrevía a decirle a los obispos lo que pensaba cara a cara. Con autoridad, porque fue el que mejor estudió el fenómeno de la religión en la sociedad actual. Con libros tan importantes como Postmodernidad y cristianismo, Capitalismo y religión o Fe y política.

Pero quizás su obra más fecunda haya sido su propia vida, basada en una profunda espiritualidad, que sabía transmitir con una enorme cercanía. Era un gran conferenciante, siempre muy solicitado, pero ejercía sobre todo el ministerio de la palabra con mucha dedicación y mucho carisma en diferentes grupos de fe de Madrid y de México. Solía impartir conferencias y dirigía convivencias, retiros y ejercicios espirituales en todo el país.

¿EL TIEMPO...?

SI NADIE ME LO PREGUNTA, LO SÉ; PERO SI QUIERO EXPLICÁRSELO AL QUE ME LO PREGUNTA, NO LO SÉ. Confesiones XI,14,17