No sé -es más, sabemos que nadie lo sabe- lo que todavía durará esta crisis económica, que, en mayor o en menor medida, al parecer muchas personas estamos sufriendo. Digo "parece", porque esta crisis aun siendo dura y cruel, está careciendo por completo de un importante eco social y no está teniendo apenas incidencia en una cada vez más devaluada opinión pública.
Probablemente los directamente afectados, no tienen a su alcance los medios adecuados para hacerse oír (ya sabemos que hace ya mucho tiempo renunciamos a la construcción de un mínimo tejido social y corporativo por el plato de lentejas del consumo y las vacaciones hipotecadas como "guay of live"). Por otra parte los habitantes de ese lucrativo tanatorio al que llamamos política institucional no están dispuestos a realizar un mínimo análisis de la crisis y muchísimo menos a mover un solo dedo para cambiar las, al parecer, hipotéticas causas que nos han llevado hasta aquí. (¡Nada de nada!, pero eso sí ¡Viva el Tratado de Lisboa!).
Sin embargo... ¿quién lo iba a decir? Es desde esa más que trasnochada y anquilosada, decrépita y arrumbada cosa a la que se llama Iglesia Católica, desde la que he tenido que recibir un poco de luz y esperanza, aliento y estímulo para pensar, llevar a cabo y dejar venir una urgente transición paradigmática posible: " La crisis nos obliga a revisar nuestro camino, a darnos nuevas reglas y a encontrar nuevas formas de compromiso, a apoyarnos en las experiencias positivas y a rechazar las negativas. De este modo, la crisis se convierte en ocasión de discernir y proyectar de un modo nuevo". Caritas in veritate, 21.
A lo largo de la Encíclica se van desgranando distintas propuestas, que progresivamente podremos ir incluyendo en este Blog, ya que son ciertamente sugerentes e interesantes de valorar. Realmente puedo decir, que merece la pena vivir (aunque a bofetada limpia) en y de esta Iglesia en la que permanece todavía el "buen olor" del evangelio de un tal Jesús.
5 comentarios:
Queremos más!!!!
hey, cronólatra, Cómo va el verano? Parece ser que elegimos las mismas lecturas para el tiempo estival. La verdad es que semos un poquito raritos. Ahora bien, como bien dices, a veces encuentras como vocanadas de aire fresco que te mantienen viva la esperanza. Quien lo iba a decir, la muy criticada Iglesia va y da la cara con una claridad meridiana y una valentía mayúscula. Sin embargo, en la redacción misma de la CIV existen numerosas cuestiones más que discutibles (parece como si hubiesen querido dar una de cal y una de arena). En fin, ya tendremos tiempo de comentarla carat encíclica.
Un saludo y que sigan bien las vacaciones, o lo poco que nos queda de ellas.
Hola cronólatra! Soy Josep, durante este año me vas a tener afiliado al blog, ya que posiblemente al que viene quiero estar en la facultad y quiero ir lo más preparado posible, y que mejor que practicando en los blogs jaja.
Bueno, sinceramente creo que la palabra crisis viene con un sentido engañoso, es una crisis de ricos que estan pagando los pobres. Porque para ser francos, gente en "crisis" siempre ha habido, simplemente que ha sido mucha menos. Que ahora existan más casos, sí, pero la crisis se nota en la gente que antes podía comprar más que ahora, los que antes no tenían nada ahora siguen igual o peor.
Que significaria salir de la crisis? Pues que volviéramos a como estábamos antes, donde hay una clase media contenta con poder consumir lo que consumían, una clase rica con todos los gastos que les dé la gana, y una clase pobre y silenciada que no tiene manera alguna para reclamar un poco de justicia.
A los ricos les conviene crear una clase media, contenta y consumidora para seguir siendolo, si estuviéramos todos realmente pobres y no en "crisis" es cuando se crearía conciencia, o como mínimo ambición para reclamar igualdad económica y con un poco de suerte cambiaríamos (con perdón o sin él) esta mierda de sistema económico, inhumano, antiecologia, y que solo consigue sacar lo peor del ser humano para ser más que los otros.
Adiós y gracias!
Hola Josep: Si la facultad a la que aludes es la facultad de la filosofía déjame decirte algo: ¡Enhorabuena! El mundo no necesita tanto filósofos profesionales, con un espléndido título de filosofía, como de gente que piense hasta el fondo la realidad que le rodea. Decía un filósofo para más señas Gabriel Marcel, que la filosofía consistía en un ejercicio de perforación intelectual de lo concreto, de lo que vivimos cada día. Entra en facultad como el que entra en una comunidad de investigación filosófica (como se denomina "plesiólogos"), una comunidad dialógica sincrónica (con los que ya están: profesores y alumnos, y también diacrónica: con los filósofos y pensadores que han estado espoleados permanentemente en la búsqueda de verdades. Como buena introducción al ejercicio de la filosofía creo que puede servirte la lectura de los "Parerga y Paralipómena" de Arthur Shopenhauer,sobre todo el opúsculo "Sobre la filosofía de la Universidad". Tal vez el creador de plesiólogos te puede ayudar en esto.
En el caso de que la facultad de la que hablas no sea la de filosofía... ánimo seguimos necesitando pensadores.
Un abrazo y gracias por tu participación.
Si si, no te equivocas, me refería a la de filosofía, sé que mucho futuro para encontrar trabajo no tengo, pero no voy a estudiar una carrera para tener mejor trabajo o mejor posición, no son mis ambiciones esas.
Mayormente lo hago, para explicarlo de una manera "para salir de la caverna" por decirlo así y en un futuro ayudar a salir a mis alumnos si pudiera ser jaja.
Eso mismo le he pedido a Jesús(plesiólogos) hoy en clase, y me dirá cierto listado de libros, de todas formas me apunto el tuyo, y cuando me lo lea ten por seguro que te comentaré algo.
Muchísimas gracias.
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